Hierva un trozo de jengibre en agua durante 10 a 15 minutos para hacer té, o mastique un trozo pequeño de jengibre fresco. Conocido por sus propiedades antieméticas y antiinflamatorias.
Inhale aceite esencial de menta con un paño o beba té de menta. La menta es conocida por su capacidad para relajar los músculos del estómago y mejorar el flujo de bilis.
Respire profundamente, inhale por la nariz mientras cuenta hasta tres, sostenga mientras cuenta hasta tres y exhale por la boca mientras cuenta hasta tres. Se sabe que la respiración profunda activa el sistema nervioso parasimpático y reduce las náuseas.
Añade una rodaja de limón a un vaso de agua y bébelo lentamente o inhala el aroma del aceite esencial de limón. El limón es conocido por su aroma refrescante y sus propiedades antieméticas.
Aplique presión en la parte interna de la muñeca, aproximadamente dos dedos y medio hacia abajo desde el pliegue de la muñeca, o use muñequeras de acupresión. Se sabe que esta técnica interfiere con las señales nerviosas que provocan náuseas.
Coloque una compresa fría o una bolsa de hielo envuelta en un paño en la nuca durante unos minutos. Es conocido por sus efectos calmantes y reguladores de la temperatura que pueden aliviar las náuseas.
Remoja una bolsita de té de manzanilla en agua caliente durante 5 minutos y bébela lentamente. La manzanilla tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y astringentes.
Hervir 1 taza de arroz en 2 tazas de agua, colar y beber el agua restante. El agua de arroz es un líquido suave que puede aliviar la irritación del estómago.
Beba una bebida deportiva rica en electrolitos. Esto es beneficioso para la rehidratación, especialmente si ha estado vomitando.
Consuma una dieta de plátanos, arroz, puré de manzana y tostadas. Estos alimentos son suaves y agradables al estómago.
Hervir una ramita de canela en agua durante 10 minutos y beber a sorbos lentamente. La canela tiene propiedades antieméticas y carminativas.
Bebe agua de coco para rehidratarte. Es rico en electrolitos y es suave para el estómago.
Mastica una cucharadita de semillas de hinojo o hiérvelas en agua para hacer té. El hinojo ayuda en la digestión y puede aliviar las náuseas.
Mezcla 1 cucharada de vinagre de sidra de manzana en un vaso de agua y bébelo lentamente. Puede ayudar a calmar el estómago.
Mastique un par de dientes o agregue aceite de clavo a un vaso de agua tibia y beba. El clavo tiene propiedades antisépticas y anestésicas.
Inhale aceite esencial de lavanda agregando unas gotas a un paño o recipiente con agua caliente. La lavanda es conocida por sus propiedades calmantes y calmantes.
Tome suplementos de vitamina B6 como se indica en el paquete. La vitamina B6 se ha estudiado por su potencial para aliviar las náuseas, especialmente durante el embarazo.
Coma algunas galletas saladas, que son blandas y pueden ayudar a absorber los ácidos del estómago.
Siéntate y evita en la medida de lo posible acostarte. Una posición erguida ayuda a la digestión y puede reducir el reflujo de ácido que podría causar náuseas.
Salga o abra una ventana para tomar un poco de aire fresco. El aire fresco y una buena ventilación a veces pueden ayudar a aliviar las náuseas.