Utilice soluciones comerciales de rehidratación oral (SRO) como Pedialyte, o haga una solución casera con 6 cucharaditas de azúcar y 1/2 cucharadita de sal disueltas en 1 litro de agua. Beba según sea necesario para reponer los electrolitos.
Beba agua de coco natural, ya que es rica en electrolitos y puede ser una alternativa más suave a las bebidas deportivas. Limite a 1-2 tazas al día, según la tolerancia.
Consuma infusiones de hierbas como manzanilla o té de menta. Pueden ser hidratantes y calmantes, especialmente si el paciente experimenta náuseas. Se recomiendan 1-2 tazas al día.
Disfrute de sopas a base de caldo, que son hidratantes y proporcionan nutrientes esenciales. Se prefieren los caldos caseros o bajos en sodio. Consumir según tolerancia.
Consuma sandía u otras frutas con alto contenido de agua como pepino o fresas. Estos pueden ayudar a hidratar y proporcionar vitaminas esenciales.
Las paletas heladas de jugo de frutas caseras o las paletas de electrolitos pueden ser calmantes e hidratantes, especialmente si el paciente tiene llagas en la boca o dificultad para tragar.
Diluya las bebidas deportivas con agua para reponer los electrolitos sin exceso de azúcar. Mitad bebida deportiva y mitad agua es una buena combinación.
Coma rodajas de pepino, que tienen un alto contenido de agua y pueden ser refrescantes. También se pueden agregar al agua para darle sabor.
Agregue rodajas de frutas como limón, lima o bayas al agua para realzar el sabor y fomentar una mayor ingesta de líquidos.
Consuma frutas con alto contenido de agua como naranjas, kiwis y melocotones. Estas frutas no sólo son hidratantes sino que también aportan vitaminas y fibra.
Utiliza geles de hidratación o multiplicadores de hidratación según lo recomendado. Están diseñados para mejorar la absorción de agua. Siga las instrucciones del embalaje.
Beba jugos de frutas diluidos con agua para evitar el exceso de azúcar mientras se mantiene hidratado. Se recomienda una proporción de 1:1 de jugo y agua.
Coma yogur o beba kéfir, que aportan hidratación y probióticos beneficiosos. Elija variedades simples o bajas en azúcar.
Beba jugo de aloe vera o agua con infusión de aloe, que puede ser hidratante y calmante para el sistema digestivo. Monitorear la tolerancia.
Prepara limonada casera con jugo de limón fresco y una pequeña cantidad de azúcar, diluida con agua. Esto puede ser refrescante e hidratante.
Prepara batidos verdes con verduras hidratantes como espinacas y frutas. Agrega agua o agua de coco como base líquida.
Agregue hojas de menta fresca al agua. La menta tiene un efecto refrescante y puede hacer que el agua sea más apetecible, aumentando la ingesta de líquidos.
Hervir la cebada en agua, colar y beber el líquido enfriado. El agua de cebada puede ser hidratante y suave para el estómago.
Si al paciente le gusta el café, opte por versiones descafeinadas para evitar el efecto diurético de la cafeína.
Congele soluciones de electrolitos o bebidas deportivas diluidas en cubitos de hielo. Agréguelos al agua para obtener hidratación adicional y reposición de electrolitos.