Aplique un paño húmedo y frío en las áreas afectadas durante 10 a 15 minutos. Actualiza el paño según sea necesario. Puede ayudar a reducir la inflamación y calmar la piel.
Masajee suavemente una cucharada de aceite de coco en las zonas afectadas. Vuelva a aplicar 2-3 veces al día o según sea necesario para la hidratación.
Mezcle 2 tazas de sal de Epsom en un recipiente con agua tibia. Remoje las manos y los pies durante 15 a 20 minutos. Enjuague con agua tibia y seque. Limitar el tiempo si la piel es muy sensible.
Aplicar generosamente gel puro de aloe vera en las zonas afectadas. Vuelva a aplicar 2-3 veces al día o según sea necesario. Guarde el gel de aloe vera en el refrigerador para enfriarlo aún más.
Utilice agua tibia para bañarse y lavarse las manos. Pruebe la temperatura del agua con una parte de su cuerpo que no se vea afectada antes de usarla.
Opte por zapatos con amortiguación suave, puntera ancha y material transpirable. Gire el calzado diariamente para minimizar los puntos de presión.
Coloque rodajas de pepino frías en las zonas afectadas durante 10 a 15 minutos. Refresque las rebanadas según sea necesario.
Agrega 1 taza de avena finamente molida al agua tibia del baño. Remojar durante 15 a 20 minutos, luego enjuagar con agua tibia y secar.
Masajee suavemente una cantidad generosa de manteca de karité en las zonas afectadas, especialmente después del baño. Úselo con tanta frecuencia como sea necesario.
Abstenerse de utilizar fuentes de calor directas. Cuando cocine, use guantes de cocina o ropa protectora.
Aplique unas gotas de aceite de vitamina E en las zonas secas y masajee suavemente. Úselo 1 o 2 veces al día, especialmente después de lavarse las manos o los pies.
Mezcle de 5 a 6 gotas de aceite de lavanda con 1 cucharada de un aceite portador (como aceite de coco o de jojoba). Masajee suavemente las zonas afectadas una o dos veces al día.
Aplicar según las indicaciones de la etiqueta del producto o según lo recomiende un dermatólogo. Es fundamental elegir cremas adecuadas a la gravedad de la afección.
Humedezca un paño suave con hamamelis y aplique suavemente sobre las zonas afectadas. Déjalo secar al aire. No enjuague. Repita 1-2 veces al día.
Opte por jabones y lociones etiquetados como "para pieles sensibles" o "sin fragancias". Siempre pruebe un producto nuevo en un área pequeña antes de su aplicación completa.
Masajee unas gotas de aceite de jojoba en las zonas afectadas, especialmente después de la exposición al agua. Se puede utilizar varias veces al día según sea necesario.
Prepare un té de manzanilla fuerte (2 o 3 bolsitas de té en una taza de agua hirviendo), déjelo enfriar y úselo como una compresa en las áreas afectadas durante 10 a 15 minutos. Actualiza la compresa según sea necesario.
Cuando descanse, eleve las manos o los pies sobre almohadas para ayudar a reducir la hinchazón y el malestar. Intente elevarse durante al menos 30 minutos, 2 o 3 veces al día.
Aplicar una fina capa en las zonas afectadas, especialmente después del lavado. Continúe con una crema hidratante para retener la hidratación. Consulta las instrucciones del producto para conocer las cantidades exactas.
Después de aplicar una crema hidratante o un tratamiento, use guantes o calcetines de algodón para ayudar a retener la humedad. Es especialmente eficaz cuando se usa durante la noche.